Arrancó el partido con una presión a toda pista de los de Macario que dificultaban la salida del balón palmerino. Una pérdida de Parra (el de ellos) hace que Bujalance avise con tiro al larguero de Víctor. En la acción posterior de jugada de estrategia consigue José batir a Cristian haciendo el 1-0 a favor local. Nada más en el saque una individualidad y fallo defensivo lo remacha Víctor al segundo palo que de nuevo estaba en tablas el encuentro.
Se echó hacia arriba en busca del segundo gol para Smurfit pero esto trajo que una jugada de estrategia en banda lo aprovechase David Leal en el área para colocarla en el fondo de la red ante el debutante en la portería, Carlos. La respuesta fue instantánea cuando en la entrada de Jorge en pista puso una de sus geniales jugadas ante la defensa cordobesa que en primera instancia la paró Cristian pero aprovechó el rechace para hacer el 2-2 en menos de 5 minutos.
Un inicio bastante loco, donde no había temor y ambos conjuntos buscaban la ventaja. Llevaba el balón en la banda el anterior goleador de Bujalance, David Leal que se la cede a su capitán Pakito para que de nuevo aproveche otro segundo palo adelantando de nuevo a los visitantes. La tónica no varió cuando ahora la estrategia la aprovechó el equipo palmerino desde el córner y que Iván Ramos pusiera un duro derechazo que Cristian no logró atajar.
Solo se llevaban ocho minutos y se habían visto seis goles. El partido a medida que avanzaba se estaba acusando el potente inicio, cambios en los banquillos. Defensas más intensas a mitad de pista, que cogían a veces la contra pero los porteros ante el gran trabajo que tenían respondían con seguridad. Hubo una gran triple parada de Carlos pasado el ecuador que era un gol cantado y mandó a córner con gran facilidad.
A partir de aquí llegó un recital de buenos minutos de los de Macario. Pakito con una gran vaselina y David Leal de un potente tiro desde el centro consigue distanciar con dos goles a falta de seis minutos para el final de la primera parte. Los palmerinos en un mar de dudas, se estaban viendo superados en este tramo final. David Leal y Nuñez estaban poniendo más mordiente al ataque bujalanceño que casi conseguían el sexto.
Joaquín Martín a poco para el final decidió dar pausa con un tiempo muerto. El equipo cordobés alcanzó la quinta falta lo que les echó un poco atrás. Pero otra jugada aislada y en banda utilizando estrategia la coge Juan Carlos y con la cabeza la clava a la escuadra palmerina a falta de dos minutos. Con este resultado, no dio lugar a más ocasiones el partido y se fueron jugadores a vestuarios con un resultado a favor de 3-6 para Bujalance.
En el arranque de la segunda parte, la grada se vino arriba para apoyar al equipo palmerino que en los primeros minutos buscaba un tanto en busca de la remontada épica. El equipo visitante no se achantaba ante el ímpetu que le ponía Smurfit Kappa, el pívot sevillano José estuvo a punto de hacer el cuarto pero Fernando (que ahora defendía la portería visitante) con seguridad blocó. En la jugada siguiente, una falta botada por Iván se queda el balón en el área y es Jorge quien fusila al portero cordobés haciendo el 4-6. Quedaban diecisiete minutos para decantarse quién sería el ganador, que aún no se veía quien sería el ganador claro.
Los árbitros estaban parando demasiado el juego, y cargando de faltas el electrónico para los dos equipos. Se pasaron los cinco minutos de la segunda parte, y Smurfit Kappa concedía metros al rival esperando atrás para pillar con rápidas contras. Carlos estaba respondiendo con grandes paradas de Núñez y Pakito. El equipo palmerino no paraba de encontrarse con Fernando, sino era José, era Pajón que era un muro en la mañana de hoy. Antes del ecuador una gran salida de presión cordobesa que no se coloca bien en defensa y es un 1x1 con el portero que Penalba la coloca a la izquierda del portero local.
Esta desventaja de tres goles, provocó que Joaquín Martín probara el portero-jugador con Iván vistiendo la camiseta distintiva. Avisó Parra (el de ellos) con un disparo al poste, pero parecía que el equipo cordobés no sufría con esta superioridad, disfrutaba de la ventaja intentando que el balón no pasara su área con una defensa muy intensa a mitad de pista. Un robo de su capitán Pakito en el centro ponía el octavo a puerta vacía y hacía su hat trick particular.
Los minutos finales ya estaban casi sentenciados. Smurfit Kappa lo intentaba con más corazón que cabeza y se llevó dos goles más. Uno de Núñez desde el doble penalti (que había fallado otro) y faltando escasos segundos, Penalba consigue un hat-trick batiendo a puerta vacía un cabezazo en el borde de la línea de gol.
Pues con estos 3 puntos sumamos la 2ª victoria consecutiva y la primera de la temporada fuera del Pepe Montalbán. Esperemos que esta racha continue, que los goles no dejen de sucederse a nuestro favor y poder así acercanos más a los puestos de privilegio.
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